Perro que ladra no muerde

Al parecer, monseñor, se cagó hasta las patas cuando recibió un llamado intimidatorio en el arzobispado de la plata. Dicen las crónicas periodísticas que lo invitaron de mala manera a cesar en sus críticas a las políticas del gobierno de Kirchner.

Infobae.com supone que las críticas de Aguer son para algunos temas y exceptúan el económico, porque Aguer habló bien de la recuperación del país.

Es de esperar que mañana, Radio Hez, como leí por ahí, y todos los chupacirios que pululan ahí adentro haciendo de periodistas, hagan campaña en favor de la víctima de las amenazas, tan temibles, por cierto.

Por lo menos esta vez no hay videos, aunque sería un gustazo publicar imágenes del mismo si éste existiera.

Desde aquí mi saludo a monseñor en este dificilísimo trance. Ah, y que no se acostumbre. (a ser la víctima, claro)

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