fastidiado
supongo que esa es la palabra.
no sé cómo explicarlo. hoy el mal humor me altera. la más mínima pequeñez me pone peor. la vida se está poniendo muy aburrida, rutinaria. y eso me fastidia.
me fastidia que sea viernes a la noche y yo esté escribiendo esto. es que aquellos con quienes pensé que las cosas podían ser distintas... están durmiendo. acá al lado mío o en sus respectivas casas. un embole o sea.
un asco. a esta frustración nocturna hay que sumarle el día de hoy, el de ayer, el de anteayer... y así...
las ganas de compartir con fran cosas que a él se ve que mucho no le interesan. una birra. no es mucho pedir... o una noche despierto. es que yo soy un ser de la noche. cuando cae el sol yo empiezo a vivir y él por ahí es al revés... pero una noche, solo una noche para mí... sin quejas, sin sueño, sin cansancio. una noche en la que lo importante sea estar juntos y no dónde, cómo, cuándo...
ayer se cumplió un mes más... no me dijo nada. se había acordado el día anterior. yo había pensado invitarlo a cenar, nunca lo hicimos acá. siempre en mardelplata. pero el dáa anterior me avisó que tenía una cena... y bueh... lo único que atiné a decirle es "ves que a vos siempre hay que avisarte las cosas con un mes de anticipación?". no le dije por qué. ya no importa. el 17 pasó y nadie se enteró. no pienso volver a pensar en invitarlo a cenar. ya lo quise hacer para cuando cumplimos el año y no hubo caso... que quería estar conmigo y no sé qué otra boludez. yo quería hacer algo especial, como para tener algo que acordarnos de ese día. no me acuerdo de nada, porque no hicimos nada. en cambio, al otro día o tomamos un helado. yo había ahorrado para ir a un restó que es lindo... pero nada de eso lo entusiasma. no espero cambiarlo, ya sé que no se puede. pero bueno, en cambio, voy a desistir de invitarlo a cenar o a almorzar los dos solos. se ve que no quiere. en más de un año y medio nunca me lo propuso, ni siquiera para compensar las invitaciones mías que no fueron. supongo que no es importante. seré yo que pienso en pavadas. para él las cenas, los cafés, todo eso... siempre es con otros. conmigo, de pedo al boliche gay y volver temprano. a dormir. otro embole.
hoy un pendejito de unos 7 años, con una bolsa llena de poxirràn, me escupió la zapatilla. estábamos por cruzar corrientes, frente al obelisco. fue una sensación rara porque no pude decirle nada... qué le voy a decir. le dije bien bajito "qué hacés?". pero en el fondo sabía que él ni se dio cuenta. de nada.
el chofer del colectivo puteò porque le pagué con diez pesos. me chupa un huevo que tu laburo sea una mierda, chofer de costera. dijo "la concha de la lora"... no me importó, de todas formas. si no te gusta que te paguen con 10 pesos, "quejate en la empresa", como dicen los choferes, ansiosos de lavarse las manos cada vez que uno se queja por algo. como si la camisa con la rosa ridícula esa la lleváramos los pasajeros. me encanta que los empleados de "la empresa" hablen de ella como si fuera una entidad aparte. los choferes, les guste o no, son la cara de "la empresa" para los pasajeros. pero no, ellos insisten con el mismo discurso ridículo: "reclámele a la empresa!". chofer pelotudo, VOS sos la empresa también, pedazo de sorete, por más que no te guste. forro.
encima, llego a mi casa y hay un personaje de esos que no me cayó bien de entrada... y en un momento alguien dice "la chica esta... esa que es depresiva, racista y nazi..." y el sospechoso pibe que salta diciendo "eh! ser racista no es ser depresivo!" y a mí que me queda un tufillo a justificación en esa frase de mierda. pero como es amiguìsimo de mi hermana, no quise entrar en discusiones absurdas. aunque el tipo me parezca un pelotudo con mayúscula, o sea un PELOTUDO... como todo racista, es decir.
y fran que llega y me alegra la noche. por cinco minutos. y después... ya está... esa frase "yo quiero estar con vos..." y cierra los ojos. y ni bola. y yo sin sueño. con ganas de moverme, de charlar, de salir, de tomar algo, de todo!!!! menos de dormir. menos de dormir. porque otra es que cuando llega el momento de dormir, me dice: "puedo ir a la otra cama?" o "podés pasarte a la otra cama?". porque no puede dormir con alguien en una cama de una plaza. solo en una de 2 plazas. y dormir en una cama de 2 plazas es como dormir solo también. a mí me encanta dormir con alguien, no importa dónde. debo ser un tarado. o un alien. y es otra cosa más que es importante para mí y no puedo compartir con él.
esta noche soy un mar de lamentos y frustraciones... que no terminan en este párrafo. (mierda!) quizá terminen en mi sesera.
suficiente lástima por hoy.
no sé cómo explicarlo. hoy el mal humor me altera. la más mínima pequeñez me pone peor. la vida se está poniendo muy aburrida, rutinaria. y eso me fastidia.
me fastidia que sea viernes a la noche y yo esté escribiendo esto. es que aquellos con quienes pensé que las cosas podían ser distintas... están durmiendo. acá al lado mío o en sus respectivas casas. un embole o sea.
un asco. a esta frustración nocturna hay que sumarle el día de hoy, el de ayer, el de anteayer... y así...
las ganas de compartir con fran cosas que a él se ve que mucho no le interesan. una birra. no es mucho pedir... o una noche despierto. es que yo soy un ser de la noche. cuando cae el sol yo empiezo a vivir y él por ahí es al revés... pero una noche, solo una noche para mí... sin quejas, sin sueño, sin cansancio. una noche en la que lo importante sea estar juntos y no dónde, cómo, cuándo...
ayer se cumplió un mes más... no me dijo nada. se había acordado el día anterior. yo había pensado invitarlo a cenar, nunca lo hicimos acá. siempre en mardelplata. pero el dáa anterior me avisó que tenía una cena... y bueh... lo único que atiné a decirle es "ves que a vos siempre hay que avisarte las cosas con un mes de anticipación?". no le dije por qué. ya no importa. el 17 pasó y nadie se enteró. no pienso volver a pensar en invitarlo a cenar. ya lo quise hacer para cuando cumplimos el año y no hubo caso... que quería estar conmigo y no sé qué otra boludez. yo quería hacer algo especial, como para tener algo que acordarnos de ese día. no me acuerdo de nada, porque no hicimos nada. en cambio, al otro día o tomamos un helado. yo había ahorrado para ir a un restó que es lindo... pero nada de eso lo entusiasma. no espero cambiarlo, ya sé que no se puede. pero bueno, en cambio, voy a desistir de invitarlo a cenar o a almorzar los dos solos. se ve que no quiere. en más de un año y medio nunca me lo propuso, ni siquiera para compensar las invitaciones mías que no fueron. supongo que no es importante. seré yo que pienso en pavadas. para él las cenas, los cafés, todo eso... siempre es con otros. conmigo, de pedo al boliche gay y volver temprano. a dormir. otro embole.
hoy un pendejito de unos 7 años, con una bolsa llena de poxirràn, me escupió la zapatilla. estábamos por cruzar corrientes, frente al obelisco. fue una sensación rara porque no pude decirle nada... qué le voy a decir. le dije bien bajito "qué hacés?". pero en el fondo sabía que él ni se dio cuenta. de nada.
el chofer del colectivo puteò porque le pagué con diez pesos. me chupa un huevo que tu laburo sea una mierda, chofer de costera. dijo "la concha de la lora"... no me importó, de todas formas. si no te gusta que te paguen con 10 pesos, "quejate en la empresa", como dicen los choferes, ansiosos de lavarse las manos cada vez que uno se queja por algo. como si la camisa con la rosa ridícula esa la lleváramos los pasajeros. me encanta que los empleados de "la empresa" hablen de ella como si fuera una entidad aparte. los choferes, les guste o no, son la cara de "la empresa" para los pasajeros. pero no, ellos insisten con el mismo discurso ridículo: "reclámele a la empresa!". chofer pelotudo, VOS sos la empresa también, pedazo de sorete, por más que no te guste. forro.
encima, llego a mi casa y hay un personaje de esos que no me cayó bien de entrada... y en un momento alguien dice "la chica esta... esa que es depresiva, racista y nazi..." y el sospechoso pibe que salta diciendo "eh! ser racista no es ser depresivo!" y a mí que me queda un tufillo a justificación en esa frase de mierda. pero como es amiguìsimo de mi hermana, no quise entrar en discusiones absurdas. aunque el tipo me parezca un pelotudo con mayúscula, o sea un PELOTUDO... como todo racista, es decir.
y fran que llega y me alegra la noche. por cinco minutos. y después... ya está... esa frase "yo quiero estar con vos..." y cierra los ojos. y ni bola. y yo sin sueño. con ganas de moverme, de charlar, de salir, de tomar algo, de todo!!!! menos de dormir. menos de dormir. porque otra es que cuando llega el momento de dormir, me dice: "puedo ir a la otra cama?" o "podés pasarte a la otra cama?". porque no puede dormir con alguien en una cama de una plaza. solo en una de 2 plazas. y dormir en una cama de 2 plazas es como dormir solo también. a mí me encanta dormir con alguien, no importa dónde. debo ser un tarado. o un alien. y es otra cosa más que es importante para mí y no puedo compartir con él.
esta noche soy un mar de lamentos y frustraciones... que no terminan en este párrafo. (mierda!) quizá terminen en mi sesera.
suficiente lástima por hoy.
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