Transfobia en medios de comunicación
Es muy difícil trabajar para la inclusión cuando desde los grandes medios ser apuntalan la discriminación y los prejuicios. Cuando los discursos se basan en rumores
La realidad trans todos los días trae nuevos desafíos de empatía a quienes jamás cuestionaron su crianza heteronormativa, heterosexista, patriarcal, cis.
En estos días se conoció la historia de Sergia, una persona de 60 años que optó por cambiar su identidad de género por estos días. Un rumor malicioso que se convirtió en noticia indicaba que lo había hecho para jubilarse antes, dado que los varones se jubilan a los 65. La versión estaba fundamentada en supuestos dichos de compañeros de trabajo anónimos, descontentos por el accionar de su ex compañero Sergio, ahora Sergia.
Se divulgó su DNI anterior, se la humilló, la obligaron a hablar del tema en público. Eduardo Feinmann tuiteó algo espantoso sobre el supuesto caso, y en base a toda esa malicia llegó esta nota de diario El Día de La Plata en su versión impresa. Pocas veces he sentido tanto asco.
Desde aquí todo el repudio al medio y toda la solidaridad con Sergia, víctima de una sociedad que plantea con malicia la elección íntima y personal de una persona, vulnerando sus derechos, su identidad de género, humillando y estigmatizando.
La realidad trans todos los días trae nuevos desafíos de empatía a quienes jamás cuestionaron su crianza heteronormativa, heterosexista, patriarcal, cis.
En estos días se conoció la historia de Sergia, una persona de 60 años que optó por cambiar su identidad de género por estos días. Un rumor malicioso que se convirtió en noticia indicaba que lo había hecho para jubilarse antes, dado que los varones se jubilan a los 65. La versión estaba fundamentada en supuestos dichos de compañeros de trabajo anónimos, descontentos por el accionar de su ex compañero Sergio, ahora Sergia.
Se divulgó su DNI anterior, se la humilló, la obligaron a hablar del tema en público. Eduardo Feinmann tuiteó algo espantoso sobre el supuesto caso, y en base a toda esa malicia llegó esta nota de diario El Día de La Plata en su versión impresa. Pocas veces he sentido tanto asco.
Desde aquí todo el repudio al medio y toda la solidaridad con Sergia, víctima de una sociedad que plantea con malicia la elección íntima y personal de una persona, vulnerando sus derechos, su identidad de género, humillando y estigmatizando.
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